Querida Parroquia:
Después de 2 años que llevo en la hermosa Parroquia de San José, no exenta de luces y sombras, pero con muchas y grandes experiencias de fe, esperanza y amor, y vividas, siempre, con una gran alegría, me atrevo a escribiros, como padre y pastor, en nombre de ella para, desde la humildad, pediros vuestra colaboración y ayuda.
CARTA DE LA PARROQUIA
“Queridos hijos e hijas: soy tu madre, la Parroquia, y os pido me queráis como soy, con arrugas en la cara, pero con un corazón que os ama, que os quiere, y que os acoge desde que nacéis a la vida hasta vuestra meta final.
Yo, querido hijo/hija, os bautizo, haciéndoos, a la vez, hijos de Dios, y os preparo para haceros buenos cristianos/as a través de la recepción de mis sacramentos, que no son míos sino los de mi querido Señor. Después, con la Comunión y la Confirmación, en la que recibís la plenitud del Espíritu Santo, haciéndoos cristianos adultos. También, os reconcilio, por vuestros hermanos sacerdotes, con el Padre, a través del sacramento de la Penitencia.
A muchos, de ente vosotros, os bendigo vuestras uniones matrimoniales, y, a todos, os acompaño en la etapa final de la vida, yendo a vuestras casas a llevaros el gran tesoro que tengo, que “no es oro ni plata”, sino a mi Señor Jesús, y os administro el sacramento de la Unción cuantas veces os haga falta.
También, a ti y a tus hermanos, os alimento con la Palabra de Dios, y os formo a través de homilías, catequesis, adoración ante el Santísimo, otras oraciones, y demás medios de formación que están a mi alcance.
En muchas otras ocasiones, ayudo, a los más pobres de nuestra familia, a través de Cáritas y de otras instituciones, para aliviarlos en sus necesidades materiales más acuciantes.
Pues bien, queridos hijos e hijas, todo ello, es imposible sin vosotros, mis hijos e hijas amados, y este es el motivo de mis pobres letras, pediros “UN POCO MÁS”,
A través de colectas, Bizum, el calendario parroquial que he sacado como novedad este año, y donativos espontáneos que tantas veces hacéis. Por todos estos medios y con todo mi cariño, os pido un esfuerzo, “UN POCO MÁS”.
Pero, hoy, os quiero volver a hablar, ya lo he hecho en otras ocasiones, de las CUOTAS, es lo más seguro y estable, y no están a merced de los vaivenes de la vida: vacaciones, enfermedades, pandemias, y demás, porque es fija. Estas, se pueden hacer mensual, trimestral, semestral o anual. Sé que ya muchos la tenéis, pero la edad no perdona y, muchos que la tuvieron, ya no están entre nosotros, es una de las razones por las que han disminuido las entradas económicas. Por esto, y otras razones, y bien que lo sabéis, todo sube en esta vida, a los que las tenéis os pido el esfuerzo, del “UN POCO MÁS”.
Otros, todavía, no las tenéis, también a vosotros, os pido un nuevo esfuerzo, y, además de hacerlas, el esfuerzo del “UN POCO MÁS”.
Yo, también, estoy haciendo mis deberes, el de renegociar algún prestamos, ya me lo han aprobado en el Obispado, para bajar la cuantía, voy por el buen camino, pero en este caso se trata de “UN POCO MENOS PARA HACER QUE, DESPUÉS, SEA UN POCO MÁS”.
Queridos hijos e hijas, ánimo, sé que no vais a dejar sola a vuestra madre cuando más os necesito.
Os quiero, se que vosotros y vosotras me queréis también a mí.
Recibid mi abrazo materno, y la bendición de Dios”.
Vuestra madre, la Parroquia
(documento remitido por nuestro párroco D. Rafael Navarrete a la feligresía de la Parroquia)
